Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude. Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero solo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada. Lucas 10:40-42
"El orgullo nos hace susceptible a varios tipos de males: la ira, el resentimiento, los celos, la desconfianza, espíritu crítico, enjuiciamiento y falta de bondad.
Los pensamientos de Marta estaban demasiado centrado en sí misma. Ella dejo de poner su atención en Cristo y comenzó a observar a su hermana con ojos críticos. Su crítica publica fue una fea expresión de su orgullo.
María, en cambio, estaba tan pendiente de los pensamientos de Jesús que llegó a olvidarse completamente de los demás. Se sentó a sus pies y lo escucho atentamente."
MacArthur - 12 Mujeres Extraordinarias.
María tenia un discernimiento espiritual mucho más alto que Marta, incluso que de los discípulos de Jesús. Este discernimiento era el resultado de permanecer sentada, escuchar y reflexionar sobre las palabras de su Maestro. Recordemos que fue María quien ungió a Jesús en la preparación de su muerte. Juan 12:1-8